LA LUCHA CONTRA LA VIOLENCIA MACHISTA
Prisión incondicional para el asesino machista de Villanueva
El detenido no se niega a declarar pero explica de manera confusa el asesinato
A. T. B.
Miguel Santiago Cortés, el hombre que asesinó este pasado viernes a su exmujer, María del Carmen, en Villanueva de Gállego, pasó este domingo a disposición judicial ante el Juzgado de Instrucción número 5 de Zaragoza -en funciones de guardia-, decretando su ingreso en prisión provisional incondicional, sin fianza.
El magistrado de dicho juzgado tomó declaración al detenido pasadas las 13:15 horas de este domingo. Tras su declaración, el juez decretó su ingreso en prisión como posible autor de un delito de Violencia contra la mujer en su modalidad de asesinato y dictó una orden de alejamiento con respecto a su hijo de seis años, así como también la imposibilidad de comunicarse con el niño por cualquier medio.
Terminadas las diligencias de este domingo, se inhibirá a favor del Juzgado de Instrucción nº 3 de Zaragoza, que será el juzgado encargado de continuar con la instrucción.
Este hombre de unos 55 años de edad, que ingresará en el centro penitenciario de Zuera, no se negó a declarar aunque sus palabras fueron muy confusas. Al parecer, es consciente de lo que pasó el viernes pero no sabe explicarlo debido al estrés postraumático.
El vecino de dicha localidad fue detenido por la Guardia Civil tras degollar a María del Carmen, quien fuera su esposa, en el portal del número 7 de la calle San Mateo. Lo hizo en presencia de su hijo de seis años.
Sobre el asesino ya pesaba una condena de mayo de 2022 por amenazas con cuchillo hacia la víctima; una condena que se saldó con trabajos en beneficio de la comunidad y una orden de alejamiento de seis meses que finalizó en diciembre del año pasado. El subdelegado del Gobierno en Zaragoza, Fernando Beltrán, concretó que la mujer estuvo protegida durante un tiempo por el sistema Viogén, si bien en la actualidad estaba inactivo.
Los vecinos de Villanueva de Gállego siguen en estado de shock por la «desgracia» que conmocionó a esta localidad zaragozana con el asesinato machista de María del Carmen a manos de su exmarido; un clamor que se dejó notar este sábado en la calle durante la concentración convocada por el Ayuntamiento «en condena por el asesinato y en contra de la violencia de género». Unos 150 vecinos se reunieron a las 18.00 horas en la plaza España, donde el alcalde de Villanueva de Gállego, Mariano Marcén, leyó un manifiesto reivindicativo condenando «este atroz crimen».
«Cualquier violencia es detestable, pero la violencia en el ámbito familiar contra la mujer debería haber avergonzar a cualquier sociedad que aspire a denominarse justa. Cada situación de violencia de género es un fracaso colectivo», expresó Marcén, flanqueado en su costado izquierda por una pancarta reivindicativa que rezaba: «Villanueva de Gállego, en contra de la Violencia de Género».
El consistorio villanovense declaró luto oficial desde las 00.00 horas del domingo 5 de marzo hasta las 24 horas del día 6 de marzo, durante las cuales las banderas ondearán a media asta en todos los edificios públicos. También quedan suspendidos los actos lúdicos organizados por el consistorio durante estos días.
Esta misma pancarta viajó minutos después hasta la plaza España de Zaragoza, donde la Coordinadora de organizaciones feministas de la capital aragonesa había orquestado a las 19.00 horas una segunda concentración que también contó con una asistencia aproximada de 150 manifestantes.
El manifiesto leído en las escaleras de la sede de la Diputación Provincial de Zaragoza (DPZ) tuvo «unas palabras de aliento» para los seres queridos y familiares de la víctima así como también aprovechó para tildar de «irrisorias» las medidas de protección hacia las víctimas de violencia de género y las condenas a los agresores. «Una orden de alejamiento no es más que una simple hoja de papel que no ha permitido evitar este crimen», denunciaron.
A lo largo de esta concentración no se guardó un minuto de silencio como en otras ocasiones ya que los organizadores consideraron oportuno que este minuto fuera «de gritos». Al unísono resonó de forma contundente «vivas nos queremos», «no son muertes, son asesinatos» o «basta ya».
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