EL SECTOR DEL AUTOMÓVIL

Stellantis ofrece ampliar a jornada completa 200 contratos parciales y revisión salarial al IPC

Empresa y comité acercan posiciones en materia de salarios y contratación, pero la parte social exige que se garantice la asignación a Figueruelas de la plataforma STLA para blindar el futuro de la planta zaragozana. La compañía plantea que los sueldos suban el 5% en 2023 y según el índice de precios en los cuatro siguientes

Varios trabajadores del taller de baterías de la planta automovilística de Stellantis en Figueruelas, una empresa cuya sede social está ahora en Vigo.

Varios trabajadores del taller de baterías de la planta automovilística de Stellantis en Figueruelas, una empresa cuya sede social está ahora en Vigo. / JAIME GALINDO

Avances significativos en la negociación del convenio colectivo de Stellantis Figueruelas (antes Opel-PSA) para los próximos cinco años (2023-2027). La dirección de la planta zaragozano presentó este martes una nueva propuesta al comité de empresa que recoge mejoras sustanciales en materia de salarios y contratación, lo que le acerca a los postulados defendidos por los sindicatos. El gran escollo para el acuerdo es que la parte social exige que se garantice por escrito un plan industrial a largo plazo, lo que pasaría por la asignación a la factoría de la nueva plataforma de montaje desarrollada por el grupo para los modelos eléctricos, denominada STLA.

Una de las principales novedades sería la ampliación a jornada completa de 200 contratos que ahora son parciales, lo que reduciría de 800 a 600 el número los trabajadores que ahora tiene esta modalidad de empleo. De ellos, 150 se convertirán además en indefinidos a través del mecanismo del contrato relevo. Esta fórmula permitiría la salida de los trabajadores de más edad --los que tengan más de 61 años--. Los relevados tendrían ahora que devolver a la empresa el 20% de la jornada para acceder al pleno retiro en lugar del 33% que se venía aplicando a la empresa, es decir, nueves meses y medio de trabajo frente a los 16 actuales.

En materia salarial también se han producido cambios relevantes al garantizarse que no haya una pérdida de poder adquisitivo. La empresa propone ahora una subida del 5% en 2023 y un incremento para los cuatro años siguientes (2024, 2025, 2026 y 2027) según el IPC real del año anterior (el 50% en las tablas y el 50% en un complemento personal).

En el caso de que el IPC sea superior al 4% en los años 2023 a 2026, la diferencia se abonará en una cantidad no consolidable en el mes de enero de cada año 2024 a 2027, respectivamente. Y si el índice de precios fuera inferior o igual al 2%, se aplicará un incremento salarial excepcional del 0.2% por encima del IPC en 2025 y del 0,25% en los dos años siguientes.

La compañía también ofrece introducir la paga de beneficios del grupo Stellantis a partir de 2023, vinculada al plan de competitividad. Se abonará a los empleados con más de 180 días en activo en el año anterior, por la diferencia entre el fondo promedio de la paga de convenio PAVI, que dejará de aplicarse. Esto pueden suponer de media unos 1.000 euros más por trabajador.

Valoraciones de los sindicatos

Tras esta último oferta empresarial, los sindicatos reconocen que se han producido "avances importantes", pero creen que aún deben cerrarse algunos flecos para poder alcanzar un acuerdo. Para Juan Carlos Fandos, secretario general de la sección sindical de CCOO, el mayor escollo está en los compromisos industriales del grupo. "En 2030 vamos a dejar de producir coches de combustión Necesitamos que la plataforma eléctrica STLA se fijen en este convenio. Si no está encima de la mesa, no habrá acuerdo", aseguró. También reclamó que se incremente el número de contratos parciales.

La visión de UGT es muy similar aunque sin aludir directamente a dicha plataforma de montaje de vehículos. “Queremos que haya un plan industrial a largo plazo en torno al coche eléctrico, para nosotros es un punto sumamente importante", afirmó Sara Martín, líder del sindicato en la planta de Stellantis Figueruelas. La otra "línea roja" para que que puedan haber un pleno entendimiento, agregó, es que "haya más contratos al 100% de jornada".

Por su parte, desde Stopel Intersindical consideran que "ahora es cuando empieza la verdadera negociación". "Es imposible que aceptemos una reducción de pausas, trabajar una hora más los viernes tarde", apuntaron desde el sindicato. Junto a la flexibilidad pactada, añadieron, "supondría un aumento del absentismo además de no buscar una solución para la deuda de la bolsa de horas".