El territorio aragonés coge su color político

Las conversaciones por el control del Gobierno de Aragón y por la Diputación de Teruel están marcando unas negociaciones que, sin embargo, también atienden a las necesidades de cada municipio y la relación personal entre los candidatos de estas pequeñas localidades. Pese a su debacle en los comicios, el PAR tiene en su mano el color de varios ayuntamientos de la provincia de Teruel y un papel muy importante en consistorios repartidos por las otras dos provincias.

Zaragoza ha sido sinónimo de velocidad en las últimas horas y varias cabeceras comarcales han llegado a algunos acuerdos. PP y Vox se han unido siguiendo la línea que parece que llevará a Jorge Azcón hasta el Pignatelli. Utebo, histórico bastión socialista, pasará a manos del PP gracias al apoyo de Vox y tras frustarse un gobierno a tres con FIA. Esta fórmula sí se dará en Cuarte, pero en lugar de los independientes entra Ciudadanos-Tú Aragón.

Otras dos plazas tradicionalmente socialistas han volado lejos de las manos del PSOE. Daroca tendrá un gobierno del PP tras llegar a un acuerdo con Vox, que también entrará en el equipo. En Mallén, la agrupación municipal Por Mallén contará con el apoyo del Partido Popular para hacerse con la alcaldía. Un pacto que deja fuera del mando a Antonio Asín, recuperado por el PSOE para los comicios tras ser condenado por corrupción.

Solo Zuera y Ejea de los Caballeros cuentan como victorias en las últimas horas. En la primera localidad llegaron a un acuerdo con FIA y con Ciudadanos-Tu Aragón, lo que lleva de nuevo el bastón de mando hasta las manos de Luis Zubieta. En Ejea, Teresa Ladrero seguirá siendo alcaldesa pese a los resultados cosechados en las municipales.

En el caso de Teruel, Alcañiz es el municipio de mayor tamaño que sigue con todo en el aire. Tendrá poder en la decisión el concejal del PAR, un partido que también tiene en su mano la tendencia del consistorio de Andorra y de Mora de Rubielos. Calamocha estaba en la misma situación, pero el Partido Aragonés confirmó ayer su apoyo al socialista Manuel Rando. Todo ello bajo la directriz en la negociación en la que el partido liderado por Alberto Izquierdo se comprometía, salvo puntuales excepciones, a apoyar a la lista más votada en los pasados comicios.

Una línea de actuación que también se notará en el Bajo Aragón en el reparto de poderes dentro de las comarcas. Izquierdo confirmó ayer a este diario que en las instituciones comarcales «primará el resultado y los acuerdos municipales frente a los posibles pactos que puedan darse en la Diputación de Teruel». El líder de los aragonesistas mantuvo esta posición consciente del poder que su partido aún tiene en el territorio turolense y de la llave que maneja para la estabilidad y la gobernabilidad de la DPT.

En la provincia de Huesca, Sariñena parece que tendrá un destino muy similar al que ha tomado Calamocha, de regreso con los socialistas. El caso con peor premonición es Graus, ya que la mínima distancia entre PP y PSOE, que solo se diferencian en 90 votos, hace temblar la actuación comunitaria del PAR de apoyar a los más votados.