Estos son los alimentos que ayudan a combatir la inflamación

Nuestra alimentación es clave a la hora de realizar la digestión en nuestro organismo. En épocas de excesos, como puede ser la Navidad o las vacaciones de verano, podemos sentirnos pesados e incluso tener inflamación abdominal después de una comilona.

Leyre López-Iranzu, nutricionista de la Clínica FEMM, apunta que la relación entre la dieta y la inflamación abdominal es muy estrecha: “El tipo de alimentos que se incluyen en la dieta es clave en la lucha contra la inflamación ya que pueden aminorar o, por el contrario, agravar sus síntomas”. 

Por este motivo, existen una serie de consejos, dietas y alimentos que pueden prevenir la hinchazón y ayudarnos a sentir menos pesados después de una comida.

Combate la inflamación abdominal con estos alimentos

Diversos expertos estadounidenses aconsejan como pautas fiables ante la hinchazón abdominal la dieta mediterránea y la dieta DASH. Otros expertos, como Leyre López-Iranzu, apuntan que la dieta antiinflamatoria no tiene ningún tipo de relación con ser un régimen restrictivo ni temporal. Se trata de un plan basado en alimentos que actúan o ayudan a combatir la inflamación abdominal y que aportan energía y un funcionamiento correcto a nuestro organismo.

Encontramos diferentes tipos de inflamación, por ejemplo, el verano es “una época en la que es común abusar de determinados tipos/estilos de comida y bebida, lo que puede tener un impacto negativo en la salud, dando lugar a la hinchazón o a la retención de líquidos y favoreciendo la inflamación”, señala López-Iranzu.

La nutricionista aconseja en estos casos tomar productos que tratan de actuar eficazmente contra la inflamación, mejorando la digestión y contrarrestando la sensación de pesadez abdominal. Entre esta lista de alimentos encontramos comidas ricas en antioxidantes, diversas vitaminas, fibra y omega 3.

Las frutas y verduras de temporada contienen un alto porcentaje de antioxidantes y fitonutrientes que ayudan a nuestro organismo a combatir la inflamación. Las cebollas, la cúrcuma, las uvas rojas, las cerezas, las ciruelas y las verduras de hoja verde oscuro son algunas de las frutas y vegetales ricas en polifenoles y reducen la hinchazón corporal, mejorando las células que recubren los vasos sanguíneos.

La quinoa, el arroz integral y la avena son granos enteros que contienen mucha fibra y un índice glucémico menor que otros carbohidratos refinados, lo que hará que nuestro abdomen no se sienta tan hinchado ni pesado. El pescado azul, como el salmón, las sardinas o las truchas son alimentos con un alto contenido en omega 3, un ácido graso que es antiinflamatorio para nuestro cuerpo.

Las especias, como la cúrcuma, o los frutos secos como las nueces, las semillas de chía o las semillas de lino contienen un alto porcentaje de propiedades antiinflamatorias, que resultan útiles para el proceso digestivo y ayudan a eliminar la hinchazón.

La nutricionista López-Iranzu indica que "las bebidas azucaradas, los productos ultraprocesados y los platos precocinados contienen altas dosis de grasas trans, además de harinas y azúcares refinados, que potencian la respuesta inflamatoria del cuerpo y dificultan la prevención de la inflamación, sobre todo la crónica”. Por este motivo, el té verde es una infusión que gracias a sus compuestos antioxidantes se convierte en una de las bebidas antiinflamatorias por excelencia.

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Relación inflamación-microbiota y prevención

Tal y como apunta Mireia Elías, nutricionista del Instituto Centta y coordinadora del curso Salud digestiva y microbiota organizado por este centro, la inflamación abdominal acompañada de gases, sensación de pesadez y digestiones lentas, pueden ser claros síntomas de un desequilibrio de la microbiota en nuestro organismo.

“La microbiota y la inflamación tienen una estrecha relación. Cuando nuestro cuerpo se encuentra inflamado, la microbiota sufre alteraciones, y a la inversa ocurre lo mismo", apunta la nutricionista. El sistema inmune se encuentra en el intestino, y si se produce un desequilibrio en la composición de la microbiota, puede provocar en nuestro organismo una respuesta inmune descontrolada. Esto puede ocasionar una hinchazón abdominal incluso enfermedades intestinales inflamatorias.

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Diversos expertos señalan que el reposo digestivo y el uso de prebióticos y probióticos son importantes a la hora de combatir el desequilibrio de la microbiota y la inflamación que se puede dar en nuestro organismo. Tener unos horarios establecidos para realizar las comidas del día y su posterior reposo digestivo ayuda a limpiar y regenerar por dentro el tracto digestivo.

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Además, realizar una ingesta de alimentos que contengan prebiótico (alimento para las bacterias) y probiótico (las bacterias en sí mismas) es beneficioso para además de combatir el desequilibrio de la microbiota y la inflamación, ayudar a prevenir enfermedades para nuestra salud.