En tiempos de crisis, la fórmula del 2x1 es muy utilizada como estrategia de márketing, aunque lo habitual es que eso ocurra en el sector de la alimentación. Pero a veces los problemas obligan a agudizar el ingenio. ¿Se imaginan volver de unas vacaciones en Brasil con un buen bronceado y además con una nueva dentadura? Esa es la propuesta de un dentista brasileño que se anuncia en la prensa portuguesa.

Vicente Belchior es dentista en Fortaleza, uno de los destinos favoritos de los portugueses, de ahí su idea de anunciarse en los diarios lusos. Su oferta: un tratamiento odontológico en Ceará, en el noreste brasileño, mientras se disfruta de unas vacaciones, y todo a precios más bajos que en Portugal, de forma rápida y de calidad. "Su prótesis fija, en un solo día", reza el anuncio.

Este turismo dental no es nuevo, aunque no es habitual que un dentista anuncie individualmente sus servicios en periódicos de otro país.Normalmente se trata de paquetes de turismo de bisturí, a través de clínicas especializadas. "Pero desde hace varios años los portugueses nos buscan para recibir tratamientos", explica Belchior. De ahí su decisión.

Con chófer de la clínica

"Los pacientes hacen el tratamiento hasta en siete días útiles y en los momentos libres conocen las playas y las bellezas turísticas de Ceará, acompañados por un chófer puesto por nuestra clínica", explica el médico, quien considera que la clave para que un portugués se decida a cruzar el Atlántico para ir al dentista es "el precio". "El coste de un tratamiento y del paquete turístico es, como mucho, la mitad del precio que se cobra por el mismo tratamiento en cualquier país europeo. Y eso sin comprometer la calidad, pues aplicamos las últimas técnicas", afirma.

Pero la idea de Belchior no la comparte el colegio médico de dentistas luso. Su decano, Orlando Moreira da Silva, tiene sus dudas sobre la oferta: "Es verdad que el turismo dental está creciendo en Europa. Pero en este caso no me parece que se puedan ofrecer tratamientos mucho más baratos que en Portugal, puesto que los costes inherentes a los tratamientos no varían tanto --asegura--. Además, en tiempo de crisis, no sé como los portugueses irán hasta Brasil a cuidarse los dientes". Moreira cree que "se trata de una idea aventurera de Belchior", y recomienda a los que piensen en recurrir a sus servicios que "se informen primero en el colegio médico", ya que en estos casos "siempre es necesario estar atento a las condiciones y a la calidad del tratamiento", indica.

Implantes a 800 euros

En Portugal, sin embargo, el implante de una pieza dentaria cuesta unos 1.400 euros, el más barato. En Brasil no llega a los 800 euros. Prueba de ello es el caso de María Emilia, una profesora de 47 años que se arregló la boca en Brasil. "Siempre pensé que eso era para ricos, que se iban a operarse a otro país para que aquí nadie se enterara, pero una amiga me comentó los precios y me pareció increíble. Busqué un vuelo a Río de Janeiro y me fui dos semanas. En la primera me lo hicieron todo, y después descansé. Me gasté 2.400 euros, unos 400 o 500 euros menos que en Lisboa, y disfruté de unas vacaciones", explica.

Esta nueva fórmula cada vez tiene más adeptos en Portugal, algo lógico, ya que se trata de un país en el que el 60% de la población no tiene acceso a la medicina dentaria por falta de dinero.