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Trucos de limpieza

Cómo lavar un traje en la lavadora en casa y sin necesidad de pasar por la tintorería

Hay que tener algunos cuidados al ser prendas muy delicadas

Cómo lavar un traje en la lavadora en casa y sin necesidad de pasar por la tintoreríaFreepik

Quizá te estés preparando para un gran evento pronto o, como en el caso de mucha gente, que tengas que ponerte un traje de forma recurrente, lo que obliga a ser lavado cada cierto tiempo ya no solo por las manchas, sino también por el sudor y el propio desgaste del día a día.

Al ser prendas muy delicadas, lo más común es llevarlos a la tintorería para que sean limpiados con tratamientos especiales, pero a lo largo del tiempo es un gasto bastante importante que es mejor ahorrarse.

Sí, se puede lavar un traje en casa de varias maneras, como por ejemplo a mano o en seco con herramientas más especializadas y que se pueden asemejar a las de una tintorería, pero también se pueden meter en la lavadora. Ahora bien, hay que saber cómo para no dañar algo tan delicado y tan caro.

El método

Varios son los consejos, recomendaciones e incluso se podría decir que obligaciones para lavar correctamente un traje. Lo primero es que siempre se deben meter las piezas individualmente, es decir, la americana por un lado y el pantalón por otro, y además hacerlo del revés. También es mucho mejor cerrar la americana con los botones y el pantalón con la cremallera para que dentro del ciclo de lavado no puedan dañar nada.

Es hora de elegir el programa, el detergente, el suavizante y la temperatura. Vayamos por partes, aunque el elemento común a todo ello es la etiqueta interior del traje, ya que ahí marcará el tipo de tejido y las recomendaciones. La temperatura nunca debe superar la que ponga en la etiqueta, pero será agua fría siempre.

En cuanto al programa, corto y sin centrifugado, aunque le cueste secarse mucho más, para que no se arrugue el traje en exceso. Y por último, que el detergente sea líquido y no en polvo y evita el suavizante.

El penúltimo paso es el de tender el traje y nunca, nunca, nunca lo cuelgues directamente de las pinzas, sino de una percha para que no pierda la forma original. Y por último, simplemente asegúrate de que la plancha esté limpia y ten mucho cuidado al pasarla para no quemar ni dañar la tela. De hecho, es mejor planchar de manera indirecta, echando vapor a centímetros, pero sin tocar con la superficie de la plancha el traje.

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