Estos son algunos de los bares con más solera de Zaragoza que han cerrado en 2023

Algunos de estos negocios siguen en activo tras un traspaso a nuevos propietarios

J.B.L.

La oferta hostelera en Zaragoza es cada vez más amplia y completa. Zaragozanos y visitantes pueden disfrutar de un sinfín de locales gastronómicos con propuestas distintas con la finalidad de hacer disfrutar de cada bocado. Pero, como dice el refrán, los que entran por los que salen. Este pasado 2023, algunos bares históricos de la capital aragonesa se han visto inmersos a bajar la persiana, una tendencia inevitable en muchas ocasiones. Algunos han estado durante toda la vida y, a pesar de continuar abiertos tras un traspaso, la esencia de ser como antes quedará en la retina de muchos.

Nunca es sencillo echar el cierre de tu negocio y no volver a abrir nunca más tras llevar décadas trabajando. El mundo de la restauración atraviesa un momento de incertidumbre y algunos locales con solera de la ciudad se han visto obligados a cerrar sus puertas y dejar de servir sus últimos cafés, almuerzos o comidas el pasado 2023.

En esta tendencia, inevitable en muchas ocasiones, en la que se han visto inmersos algunos bares "históricos" de la capital aragonesa. Esta situación no solo ha afectado al sector de la hostelería, sino que negocios centenarios como droguerías, ferreterías o zapaterías han tenido que echar el cierre. Tiendas únicas hace décadas y donde el trato personalizado al cliente era la base del éxito. Un claro ejemplo es la Ferretera Aragonesa que cerró el verano pasado ante la dificultad de encontrar un relevo generacional.

Casos opuestos

Caminar por las calles de Zaragoza y observar en la cristalera de cualquier local un cartel de 'se traspasa' se ha vuelto una imagen común en muchos barrios de la capital aragonesa. Ha habido negocios hosteleros que, por distintas circunstancias, han tenido que echar el cierre o buscar un traspaso.

A pesar de que sus antiguos dueños decidieran bajar la persiana, hay locales que siguen funcionando tras llevarse a cabo un traspaso. Un claro ejemplo es el restaurante Begoña, situado en la calle Río de Aragón. Este negocio llevaba abierto desde el siglo pasado y se caracterizaba por su fuerte apuesta por la calidad del producto. Tras jubilarse los antiguos propietarios, el restaurante ha cambiado de riendas. 

El caso opuesto lo encontramos con Casa Emilio que ha tenido que bajar la persiana definitivamente. Este emblemático local de comidas, situado en las proximidades de La Aljafería de Zaragoza, llevaba abierto casi un siglo. Un espacio que recogía en sus paredes la historia de Zaragoza y Aragón. Un lugar donde las comidas se amenizaban con largas charlas y encuentros entre políticos.

Algo similar vivió el bar Siberiano, último negocio del Mercado Azoque. Este mítico establecimiento, conocido por sus bocadillos de autor, tuvo que cerrar de manera definitiva el pasado mes de mayo. La lista de negocios hosteleros que han cerrado este 2023 es amplía como el restaurante 'El Pueyo' en Belchite. Hay otros que, tras cerrar y encontrar un traspaso, siguen en funcionamiento como por ejemplo el bar Arco Iris, ubicado en el número 9 de la calle Alar del Rey; el bar Acuario, ubicado en número uno de la calle Braulio Lausín o el bar Central en plena avenida Cesar Augusto de la capital aragonesa.