El mejor puerto de Aragón en el Mediterráneo: Valenciaport

Con el objetivo común de crecer y generar actividad económica y empleo, los empresarios exportadores aragoneses y Valenciaport apuntalan su alianza gracias a la puesta en marcha de un nuevo servicio marítimo ultra exprés con Turquía y la apertura de siete apartaderos en la línea que une Zaragoza y Teruel con Sagunto y Valencia. 

La nueva ruta que une los muelles valencianos y Turquía en tan solo cuatro días supone una alternativa mucho más rápida al tráfico rodado, al tiempo que representa una apuesta por la intermodalidad, mucho más sostenible que la carretera. Esta petición del mercado aragonés se hace realidad gracias a JSV que opera el servicio en solitario agilizando los tiempos de tránsito y también los plazos de recepción de mercancías en los puertos valencianos.

En paralelo, y para que la mercancía aragonesa llegue de forma más rápida y sostenible a los recintos portuarios valencianos, siguen los trabajos de transformación de la línea Zaragoza-Teruel-Sagunto con la puesta en servicio de los siete apartaderos para trenes de mercancías de 740 m en Cariñena (Zaragoza); Ferreruela, Teruel y La Puebla de Valverde (Teruel); y Estivella, Navajas y Barracas (Castellón).

La ampliación de estos apartaderos permite el estacionamiento y apartado de trenes de longitud estándar, reforzando así la interoperabilidad de la red ferroviaria, principalmente para los tráficos de mercancías y los reefer. Estos apartaderos han sido financiados por la Autoridad Portuaria de Valencia (APV), con 26,7 millones de euros.

El ferrocarril es una apuesta clara de Valenciaport para mejorar las conexiones con Aragón y otras zonas de la península, pero también para descarbonizar su actividad. Por ello, la APV cuenta con una estrategia para mejorar sus infraestructuras ferroviarias con más conexiones y con más trenes. Unos trenes que cada vez son más largos, con más vagones y que transportan más contenedores y mercancías. Y la tendencia para los próximos años es que esta cifra siga en aumento.

Tráfico ‘reefer’

Los productos refrigerados son un sector clave para las numerosas empresas aragonesas que utilizan el puerto para transportar sus mercancías. Los muelles valencianos se han convertido en un enclave estratégico para el tráfico hortofrutícola gracias a sus 3.250 slots frigoríficos, su conectividad con más de 1.000 puertos en todo el mundo, dos almacenes de fruta y perecederos -uno de ellos en el puerto de Valencia y otro en Gandía- o su decidida apuesta por la intermodalidad. Además, el Puerto de Valencia y el Puerto de Sagunto cuentan con Puesto de Control Fronterizo (PCF), el primero de ellos de 17.000 m2, y a través de la Marca de Garantía, garantiza que la inspección de los contenedores será ágil (en menos de 45 minutos).

Energías limpias, ferrocarril, digitalización, infraestructuras sostenibles e innovación son acciones que está llevando a cabo el APV dentro de su objetivo Valenciaport 2030, cero emisiones. El objetivo es posicionarse como el hub verde, inteligente e innovador del Mediterráneo. 

Compromisos, innovación y conexiones necesarias para el tráfico de contenedores frigoríficos, imprescindibles para el transporte seguro y eficiente de mercancías perecederas como alimentos frescos o congelados que requieren un estricto control de la temperatura para preservar su calidad y evitar su deterioro durante el transporte.