Primera derrota en casa tras casi 10 meses y 12 partidos

Desde el 11 de febrero no había perdido en casa el Real Zaragoza, una tarde en la que el Alavés goleó (1-4) a un rival que no terminaba de alejarse del descenso y que lo hizo desde entonces, cuando en casa terminó la pasada Liga con ocho jornadas sin perder, cuatro victorias y cuatro empates, a los que sumó este curso los tres triunfos, ante Villarreal B, Valladolid y Eldense, y las tablas contra el Racing antes de que el Mirandés asaltara La Romareda y dejara la buena dinámica en 12 citas. A la decimotercera llegó la derrota para un Zaragoza que había construido casi un fortín en su casa.

Enrich y la caída

Hasta esa victoria del cuadro jabato el equipo sumaba 26 puntos de los últimos 36 ante su gente, unos números extraordinarios que se frenaron con la llegada del Mirandés en un duelo que se puso muy difícil con la expulsión de Enrich sumada al mal momento futbolístico global del equipo.

El Mirandés, en todo caso, ya constituía en sí una amenaza para esa racha, porque el conjunto burgalés sumó su cuarto asalto a La Romareda en 9 visitas desde 2013. Ya había ganado en la campaña 14-15 por 0-1, lo mismo que ayer, y por 1-2 en la 15-16 y en la 19-20. Además, suma otros tres empates en el estadio zaragocista, por lo que el balance es de solo dos triunfos del conjunto blanquillo ante un Mirandés que ha pescado en siete de sus nueve visitas. Las victorias zaragocistas llegaron en la 20-21, con gol de Peybernes, la última hasta ahora, y en la 16-17 con dianas de Cabrera y Edu García.