Reparto de última milla

Zaragoza testará la tecnología que permitirá optimizar las rutas de reparto

La capital ha sido elegida por Europa como laboratorio de prueba junto a Dublín

El proyecto busca mejorar la organización de las entregas de última milla

Una furgoneta de Correos, la semana pasada en Zaragoza.

Una furgoneta de Correos, la semana pasada en Zaragoza. / MIGUEL ÁNGEL GRACIA

Carlota Gomar

Carlota Gomar

Zaragoza como banco de pruebas. Este es uno de los eslóganes más utilizados por el Gobierno del PP en la capital. Uno de esos experimentos tiene que ver con la optimización de la distribución de última milla y la reducción del tráfico de reparto en las ciudades. A través del proyecto europeo Senator y de la mano de Correos, se va a testar una aplicación que permitirá a las empresas de paquetería poder compartir servicios de una misma ruta, agilizando y abaratando el proceso al compartir vehículos y personal y, lo que es más importante, reduciendo el tráfico en la ciudad y la contaminación. 

El proyecto Senator, con la Universidad de Deusto, surge para solucionar algunos de los retos en logística de las áreas urbanas, mejorando la organización de las entregas de última milla en los mercados públicos. Zaragoza ha sido elegida junto a Dublín para desarrollar la tecnología y testarla. El presupuesto total es de 3,9 millones de euros, de los que a la ciudad le corresponden 257.212 euros. En el caso de la capital aragonesa son dos los proyectos principales que se van a poner en marcha a lo largo de este año.

Por un lado, la optimización del reparto de última milla en los centros urbanos y las zonas de bajas emisiones. Correos y su filial de paquetería urgente, Correos Express, son las empresas encargadas de poner a prueba la app diseñada para coordinar repartos de distintas empresas, creando una red inteligente de distribución basada en una plataforma TIC (Tecnología de la Información y Comunicación). 

Por simplificarlo. Correos y su filial tienen distintos repartos asignados que, en muchas ocasiones, se solapan. Lo que se va a testar con la tecnología que se está desarrollando en la Universidad de Deusto es una aplicación que generará rutas conjuntas para evitar duplicidades y que dos repartidores de dos o más empresas realicen la misma salida o acudan a la misma calle o zona, optimizando así los recursos. 

Uno de los principales problemas que se ha encontrado Correos para llevar a la práctica este proyecto ha sido el cumplimiento de la Ley de Protección de Datos, ya que deben compartir información privada, como es el nombre y la dirección de los compradores. Un escollo que, al parecer, tiene solución. 

Reserva de la zona de carga y descarga

Por otro lado, a través de Senator se va a comprobar la eficacia de una aplicación con la que las empresas de reparto podrán reservar zonas de carga y descarga. A través de una aplicación móvil, las compañías podrán conocer en tiempo real la disponibilidad del espacio y guardar durante un tiempo determinado el espacio necesario para el reparto de la mercancía. Este programa se probará en el Mercado Central y el de San Vicente de Paúl y todavía está por ver qué tecnología se utilizará, si mediante tecnología Bluetooth o GPS.

Ambos proyectos van a ponerse en marcha a lo largo de este 2024, una vez se desarrollen las aplicaciones móviles. En cuanto al segundo programa, el ayuntamiento zaragozano tiene su propio plan de reserva de zonas de cargas y descarga ligado al nuevo contrato de estacionamiento regulado (zona azul y naranja) que tiene que salir a licitación a lo largo de este año. Este contrato incluirá dos novedades, una herramienta que permita conocer la ocupación de las plazas (también las destinadas a la carga y descarga) y cámaras lectoras de matrícula que vigilan los accesos a las zonas de bajas emisiones. 

Hacia una movilidad más sostenible

El concejal de Economía, Transformación y Transparencia, Carlos Gimeno, explicó que esta tecnología, testada en Zaragoza, podría exportarse el resto de ciudades europeas y ofrecerá al consistorio datos sobre los flujos de reparto en la ciudad. Una información que les permitirá adoptar decisiones de cara al futuro sobre la movilidad en la ciudad y sobre la demanda y necesidades de los zaragozanos. Además, recalcó que este tipo de proyectos permiten seguir avanzando hacía una movilidad más sostenible, también en el reparto de paquetería, que copa gran parte del tráfico diario. Por no hablar de que coloca a Zaragoza en el mapa internacional como banco de pruebas.

«Queremos que este proyecto refuerce la posición de Zaragoza ante la Unión Europea como un escenario referente de ensayos urbanos pioneros que van a marcar el futuro inmediato del funcionamiento de las ciudades del continente», explicó el concejal, una oportunidad para que «en Europa nos valoren de forma destacada en este ámbito digital, porque este papel como ciudad laboratorio forma parte también de nuestra estrategia de transformación digital».