LA CRISIS DEL PP

La crisis del PP hace mella en la militancia de Aragón: "Hemos tenido que hacer de psicólogos"

El desconcierto de los afiliados y los militantes llegó como un torrente a las direcciones provinciales del partido. Diputados y presidentes piden un cambio "rápido" y "unidad"

Jorge Azcón, arropado por los miembros del comité de dirección en Aragón, con los presidentes provinciales, donde solicitaron la celebración de un congreso extraordinario.

Jorge Azcón, arropado por los miembros del comité de dirección en Aragón, con los presidentes provinciales, donde solicitaron la celebración de un congreso extraordinario. / Jorge Azcón, arropado por los miembros del comité de dirección en Aragón.

Laura Carnicero

Laura Carnicero

La última semana de vértigo en el PP no ha dejado a nadie indiferente en Aragón. Lo saben bien los presidentes provinciales del partido, que llevan seis días con el teléfono echando humo, recibiendo llamadas y mensajes de afiliados, militantes y alcaldes "soliviantados" y "estupefactos" por las noticias que llegaban de Génova.

El enfrentamiento entre la dirección nacional y la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, no llegó a entenderse entre las bases. Por eso, reconocen varios cargos orgánicos e institucionales de la formación conservadora en Aragón, "el partido se removió" desde los cimientos para salvarse de la "desaparición". No hay medias tintas en esta crisis interna, con la ultraderecha acechando y unas elecciones generales y municipales a la vuelta de la esquina, aunque el partido haya vivido otras situaciones de similar gravedad.

"Hemos tenido que hacer de psicólogos; la gente no entendía lo que estaba pasando. Hemos tenido que dar explicaciones de algo que era inexplicable", dice con franqueza el presidente del PP de Teruel, Joaquín Juste.

"Los militantes veían a Casado como un gran líder y no entendían que dos políticos que además eran amigos pudieran llegar a esto", explica Juste, que fue el único cargo orgánico destacado del partido que el pasado jueves, 17 de febrero, no puso ningún tuit de apoyo al presidente Pablo Casado.

"No fue un descuido. Decidí no publicar ese tuit porque no podía escribir algo con lo que no estaba de acuerdo y, sobre todo, porque el enfado de los simpatizantes era muy fuerte", explica.

Ahora, ese "enfado", asegura, "se ha transformado en ilusión". "Los militantes y los alcaldes del territorio vamos a empujar para que la marca del PP vuelva al lugar que le corresponde", aseguró.

El diputado turolense Alberto Herrero, cercano también a la dirección, reconocía sentirse "dolido" por cómo ha transcurrido todo y considera que un cese a tiempo de Teodoro García Egea podría haber "reconducido la situación". Ahora, reconoce, "es el momento de darle la voz a la militancia".

El resorte del partido

En la provincia de Zaragoza, el diputado nacional Eloy Suárez, valoró la "sensibilidad" de Casado con las cuestiones relacionadas con Aragón, como en la votación de un decreto ley sobre los costes de relevo que "permitió salvar 2.500 empleos en Aragón".

En estos días convulsos, Suárez considera que "se ha tensado tanto la maquinaria, que al final el partido ha tenido un resorte para salvarse, que ha sido el propio partido desde la base, porque si no nos íbamos a la desaparición".

Los comentarios de la militancia y los cargos intermedios, en dirección contraria a los líderes del partido, dejaban claro que la época de Casado y García Egea llegaba a su fin. Asimismo, pidió rapidez para cerrar la crisis y no hacerlo en falso. "Hay una guerra a las puertas de Europa; no podemos estar aquí hablando del PP", reflexionó.

Desde Huesca, el presidente provincial, Gerardo Oliván empezó por "pedir perdón" a los afiliados y simpatizantes por la situación. Oliván, que sí mostró su apoyo a Casado de inicio, explicó su cambio de posición por la falta de reacción del líder nacional.

"Creía que Casado nos llevaría a una solución a través del diálogo, el jueves pasado había una oportunidad de dar un giro, pero con los siguientes acontecimientos no hay más respuesta que un congreso extraordinario", consideró.

Este diario trató de contactar, sin éxito, con el diputado por Huesca que apostó por Casado y le retiró su apoyo en el grupo parlamentario este martes, Mario Garcés. El presidente del PP en Zaragoza, Ramón Celma, declinó hacer declaraciones a EL PERIÓDICO.