CASADEMONT ZARAGOZA

Casademont Zaragoza: Una oportunidad perdida

El Casademont Zaragoza no aprovecha para dar un paso de gigante en otra jornada propicia

Santi Yusta intenta una penetración durante el partido frente al Obradoiro.

Santi Yusta intenta una penetración durante el partido frente al Obradoiro. / JAIME GALINDO

El Casademont Zaragoza no tiene término medio esta temporada. Solo ha sido capaz de ganar a los dos grandes, Madrid y Barcelona, y a los de más abajo en la clasificación excepción hecha del Fuenlabrada en la primera vuelta. Pero cuando puede asomar un poco la cabeza, ganar algo de tranquilidad ante equipos de la zona media, se pega el batacazo. Le sucedió en la primera vuelta frente al Bilbao Basket después de enlazar sus dos primeras victorias seguidas del curso y le ha ocurrido este fin de semana al no poder superar al Obradoiro, dejando pasar otra gran oportunidad para dar un paso de gigante en la clasificación.

Como si no se lo creyera, al Casademont Zaragoza se le han atragantado todos los rivales ante los que podía haber cambiado su destino, unas veces sin opciones casi desde el principio, otras sin saber resolver los momentos decisivos. Las dos cosas le sucedieron ante el Obradoiro, casi lo pierde antes de tiempo y al final no supo ganarlo. El conjunto de Porfirio Fisac está siendo víctima de su propia irregularidad, de su incapacidad para enlazar una serie de partidos no solo con buenos resultados sino con un juego sólido y reconocible.

Así que el Casademont se queda con siete triunfos, igualado con el Granada y manteniendo su colchón con el descenso. Porque la jornada volvió a ser propicia para los intereses aragoneses. Salvo la victoria del conjunto andaluz que sorprendió al Gran Canaria, el resto de rivales de la zona baja perdieron sus partidos. Lo hizo el Girona ante el Valencia (75-79) y sigue a solo un triunfo de los aragoneses. También el Betis pese a su fulgurante salida ante el Baskonia (71-83), y se mantiene a dos por debajo más el averaje. Lo mismo el Manresa en el Palau (93-72) y el Carplus Fuenlabrada frente al Breogán (73-92), que siguen a tres y cuatro partidos, respectivamente.

La victoria hubiera supuesto un paso de gigante por la salvación y acercarse a la zona templada de la clasificación. Porque se hubiera quedado a dos del propio Obradoiro y a una del UCAM Murcia y del Bilbao, que perdió ante el Madrid. La próxima semana tendrá una nueva oportunidad de demostrar que no es solo un equipo de extremos. Visitará al Breogán, que sigue mirando al playoff, en busca de un triunfo que le permita avanzar y soñar con las posiciones europeas. Y es que este Casademont todavía no ha encontrado su término medio.