Vuelve la andada solidaria de Rey Ardid

Son muchas las entidades sociales aragonesas que intentan invertir cada día más recursos en visibilizar sus proyectos. Y muchas también las personas que hay detrás de estos proyectos, que tienen un impacto más que relevante en el tejido social aragonés. Pero, en la gran mayoría de los casos, esta difusión se queda en el ámbito de actuación directo, y son miles de ciudadanos aragoneses los que se quedan sin conocer el gran trabajo que diariamente desempeñan muchas de las entidades sociales que operan en Aragón.

Sus actuaciones, como prestadoras de servicios y canalizadoras de demandas sociales, están confiriendo a estas entidades un papel destacado en la asunción de responsabilidades de interés común, más allá del tradicional ámbito de defensa de sus intereses particulares. Los retos medioambientales, la guerra de Ucrania y la subida de los precios de los productos y de la energía, entre otros factores, plantean un escenario de dificultades e inseguridad en el que las brechas sociales existentes no dejan de aumentar.

En este contexto, es más necesario que nunca poner el foco en el cuidado de las personas y en su bienestar. Y en la Fundación Rey Ardid llevamos ya más de 30 años centrándonos en el cuidado de colectivos en situación de vulnerabilidad social. Hace ocho años surgió una propuesta de un grupo de compañeros para la realización anual de una andada solidaria, con el objetivo de visibilizar y reforzar proyectos solidarios de carácter social en Aragón.

La idea era apoyar en especial proyectos sociales de entidades que pudieran tener menos recursos o más problemas para visibilizar sus iniciativas. Se plantea siempre un periodo de un mes para que las entidades interesadas puedan presentar un proyecto. Luego, las personas que se inscriben en la andada votan a cuál les gustaría que se destinasen los fondos recaudados. De esta forma, desde la Fundación Rey Ardid contribuimos al refuerzo de proyectos sociales de otras entidades aragonesas y les ayudamos en la difusión de los mismos.

Teniendo presente que la idea básica de capital social es que la familia, los amigos y los compañeros de una persona constituyen un valor importante al que recurrir en una crisis, si esto es válido para los individuos, también lo es para los grupos. Las comunidades con recursos variados de redes sociales y asociaciones son las que se encuentran en mejor posición para hacer frente a la pobreza y vulnerabilidad, resolver conflictos y sacar partido a nuevas oportunidades.

Las redes de interacción social fomentan y generan un clima generalizado de confianza, que desde la Fundación Rey Ardid queremos reforzar a través de esta andada solidaria, un evento anual de encuentro para todo ello. Las entidades interesadas en presentar su candidatura y conseguir fondos para su proyecto, pueden enviarlos a dejahuella@reyardid.org, hasta el 30 de junio.

Este año, la Andada Solidaria Rey Ardid Deja Huella tendrá lugar el domingo, 24 de septiembre, en Zaragoza. Muy pronto se abrirán las inscripciones.