Esto es lo que puedes hacer si otro conductor te acosa en la carretera

Insultar, pelearse o incomodar con el vehículo pueden suponer graves infracciones

Hay ocasiones en las que la carretera saca lo peor de cada persona. Insultos, gestos obscenos, broncas e incluso maniobras que pueden poner en peligro la integridad física y la vida de las personas que conducen otros vehículos. Estas son algunas de las acciones que se suceden en el asfalto y que pueden dar lugar a problemas cuyo desenlace podría ser fatal.

En la carretera conviene extremar precauciones, y estar calmado es la mejor forma de evitar posibles problemas. De esta forma se puede estar atento a todo lo que sucede alrededor y a los movimientos del resto de vehículos. Por ello, saber actuar ante un posible caso de acoso es fundamental para evitar males mayores.

El acoso puede ser sancionado con penas de hasta dos años de prisión y con multas que podrían superar los 500 euros y a los 6 puntos del carné de conducir. Algunas de las conductas más comunes y reprobables son insultar, acercarse demasiado a otro vehículo o realizar maniobras peligrosas, como frenar bruscamente.

Cómo evitar el acoso en la carretera

Lo primero que hay que hacer es apartarse y coger otro camino si el conductor que está acosando está agresivo y puede suponer un problema. Deberemos tomar la primera salida que encontremos si nos encontramos en una autopista o autovía, o coger otra calle si nos encontramos en la ciudad.

Otra de las principales recomendaciones es evitar el contacto visual. La mirada con alguien que está enfurecido puede hacerle pensar que le estamos retando y provocar un problema todavía mayor. Lo ideal será ignorar por completo todo lo que esa persona nos pueda decir o hacer.

Si está viajando otra persona con nosotros, la Guardia Civil recomienda que se grabe la situación y que se llame inmediatamente a la policía para que intervenga lo antes posible. Además, el vídeo servirá como prueba para demostrar el mal comportamiento y la peligrosidad de sus acciones en la carretera.

El simple hecho de insultar o hacer un corte de mangas a otro conductor supone una infracción a la Seguridad Vial, ya que "el conductor de un vehículo está obligado a mantener su propia libertad de movimientos, el campo necesario de visión y la atención permanente a la conducción", según establece el Reglamento General de Circulación. Esto podría suponer multas de 10 a 20 días, en función de las circunstancias personales del denunciado.

En cuanto a frenazos bruscos o acercarse a otros coches de forma deliberada, no existe una normativa que detalle cuál es la distancia de seguridad, sino que esta será la necesaria para no colisionar en caso de emergencia. Sin embargo, estas podrían ser mucho más severas en caso de accidente, dependiendo de las consecuencias y de la peligrosidad de las maniobras.