Nueva tormenta en Aragón: más de 55 litros en pocos minutos y granizo por las tres provincias

"Desde las tres de la tarde y sin parar". Así resumía el delegado en Aragón de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), Rafael Requena, lo ocurrido este jueves en la comunidad autónoma con una nueva jornada de tormentas fuertes que ha sacudido "las tres provincias" con lluvias muy fuertes y en forma de granizo en muchas localidades del territorio.

En casi cada rincón de Aragón se vivió esta nueva tormenta de junio, aunque no con la misma intensidad en todos los puntos. No obstante, se han vuelto a alcanzar registros importantes en zonas como Ribargorza donde llegaron a caer más de 74 litros en pocos minutos. Concretamente, 74,6 litros por metro cuadrado que llegaron a ser 20 en solo diez minutos, lo que es, en términos técnicos, el equivalente a recibir 120 litros en solo una hora. Lluvias "torrenciales" regando pueblos como Sopeira (que es donde se marcó este máximo), o Seira, donde se han superado los 50 litros.

Aunque en otras zonas, con menos precipitación, el daño llegaba en forma de granizo, en muchos municipios de Zaragoza, Teruel y Huesca, y hasta en la misma capital aragonesa, donde apenas duró unos minutos pero se dejó notar. La única diferencia, el tamaño de la piedra. En este sentido, fue especialente importante en la zona de Valdelinares, donde no solo cayó piedra sino que, además, esta era de un volumen importante.

Del tamaño de un huevo, han constatado en esta zona de Gúdar-Javalambre. Junto al susto para los propios vecinos, la indefensión de ver "cascotes en las calles y vehículos destrozados". Y en el campo, de nuevo las consecuencias que una granizada tan fuerte deja. Como la recibida en zonas como Campo de Daroca o Cariñena, otra de las zonas donde la lluvia y el granizo han hecho acto de presencia este jueves.

La lluvia ha barrido prácticamente toda la comunidad a lo largo del día, poniendo fin a la primera ola de calor del verano. Y lo ha hecho con una tormenta que dejaba registros importantes en zonas como el Bajo Aragón, Maestrazgo, Aínsa, Andorra, Benasque, Bielsa, Mosqueruela... Aunque más que la lluvia en sí, es la enorme cantidad de agua y piedra recibida en poco tiempo, de forma torrencial. Buena despedida a la ola de calor en Aragón.