Fin a la prohibición de fumar en las terrazas y veladores de Aragón

La publicación en el BOE del fin de la pandemia deja sin efecto todas las normativas aragonesas para combatir el covid

Desde ayer, los fumadores ya no tienen que apartarse de las terrazas para encenderse un cigarrillo

Un fumador en una terraza zaragozana.

Un fumador en una terraza zaragozana.

Ana Lahoz

Ana Lahoz

La publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE) del fin de la pandemia del covid deja sin efecto todas las normativas aragonesas que se pusieron en marcha para combatir la crisis sanitaria en los últimos tres años y medio. Esto supone, entre otras cuestiones, que se levanta el veto de la prohibición de fumar en las terrazas de los bares y restaurantes. Es decir, ya se puede fumar en estos espacios desde ayer.

También queda sin efecto la Ley 3/2020, la conocida ley aragonesa del covid, por la cual se establecía el régimen jurídico para abordar la alerta sanitaria en la comunidad. En su artículo 2 ya se especificaba que su vigencia estaba condicionada hasta que el Gobierno de España desclarase la finalización de la pandemia.

Del mismo modo, la orden SAN/223/2022 del 8 de marzo que modificaba los diferentes niveles de alerta en la comunidad, así como los levantamientos de restricciones también queda sin efecto. Es esta orden donde se recogía, entre otras cuestiones, la prohibición de fumar en terrazas y veladores.

Esta circunstancia, con la mejora de la situación epidemiológica, ha pasado desapercibida para muchos fumadores durante los últimos meses, al creer que ya no había veto alguno al consumo de cigarrillos en las terrazas. Otros, sin embargo, han mantenido la costumbre de lavantarse y fumar apartados. Desde ayer, ya no hay que hacerlo.

La Asaociación Española Contar el Cáncer quería que esta norma se ampliara a cualquier espacio, con el fin de combatir el tabaquismo y ciertas enfermedades, aunque el colectivo desea centrarse en «lugares muy utilizados por familias y niños, o por gente susceptible de coger malas prácticas». Esto supondría, en su opinión, fijar la prohibición de fumar en parques, piscinas y lugares donde se hace deporte, que «deberían ser libres de humo».

El no fumar en espacios cerrados causó su momento gran rechazo entre los fumadores, sin embargo, nadie vería normal hacerlo en la actualidad. Por eso, desde la asociación consideran necesario que ese veto se extienda a los alrededores de los hospitales, ya que es habitual ver fumar en la puerta de estos centros o en los parques infantiles. Ahora, la prohibición solo se da «en las áreas de juego», pero no en el resto. Apuntan que igual que hay placas donde se niega la entrada de perros, en casi ningún parque se señala que no está permitido el consumo de tabaco.