La actualidad del Real Zaragoza

Oficial: Cordero se desvincula del Tenerife

Ambas partes han llegado a un acuerdo "satisfactorio" y el director deportivo ya es libre para fichar por el Real Zaragoza

Juan Carlos Cordero, en una presentación en el Tenerife.

Juan Carlos Cordero, en una presentación en el Tenerife. / EL DÍA DE TENERIFE

S. Valero

Ya es oficial. Juan Carlos Cordero y el CD Tenerife han llegado a un acuerdo para romper la relación contractual del director deportivo, que se despedirá de la isla este martes en una rueda de prensa junto al consejero y director general del club, Santiago Pozas, y quedará así libre para fichar por el Real Zaragoza, con quien tiene cerrado un acuerdo desde mediados de noviembre.

Pero la firma se ha ido dilatando en el tiempo por culpa de su salida del Tenerife, en una negociación que se ha firmado este mismo lunes para que el director deportivo abandone ese club y poder firmar así contrato con el Real Zaragoza hasta 2025 y con alrededor de 300.000 euros de salario anual, cifra similar a la que percibe en el Tenerife.

Lo previsto es que Cordero sea presentado esta semana, el miércoles o el jueves, probablemente ese segundo día, por el Real Zaragoza, al no haber cláusula en su salida para que su anuncio tenga que postergarse hasta el final del mercado de enero. Este lunes, el ejecutivo del club isleño va a acudir al Servicio de Mediación Arbitraje y Conciliación de Santa Cruz de Tenerife para cerrar el acuerdo ya alcanzado y el pago de las cantidades pactadas.

El club isleño espera también anunciar esa salida para hacer público a su sustituto, que según algunas fuentes no será en ningún caso Óscar Arias, como se ha asegurado. Ahora todo apunta a que asumirá el cargo el secretario técnico del Rayo, Manu Fajardo. Cordero dará una rueda de prensa el martes junto a Santiago Pozas, director general, para explicar su salida y despedirse de la afición tinerfeñista, de un club al que llegó en febrero de 2020 y con el que estuvo a punto de lograr el ascenso el curso pasado. Cordero y el Tenerife tenían, tras la renovación de junio pasado, pactada una cláusula de desenganche por la que en caso de ruptura unilateral del contrato, que acababa en 2025, cada parte tenía que abonar a la otra lo que le restaba de percibir hasta su finalización.

Esa cantidad, unos 750.000 euros, era lo que el Tenerife pidió a Cordero para su salida en noviembre. Al final, el acuerdo, tras acelerarse la negociación a principios de Navidad se ha quedado en algo menos de la mitad, cantidad que tendrá que hacer frente de forma oficial el ejecutivo cartagenero. Cordero, tras la llegada de los nuevos propietarios y con José María Garrido como accionista de referencia en ese desembarco, no tardó en sentirse incómodo con su rol y  pidió salir del club ya en octubre y fue también cuando empezaron los primeros contactos con el Zaragoza. Primero exigió para irse la mayor parte del contrato, después un año y al final, a mediados de noviembre, pidió irse gratis, pero el Tenerife le remitió a su cláusula.

La espera desde noviembre

Esto atascó su llegada al Zaragoza, pero Raúl Sanllehí tenía claro entonces, tras un largo casting de más de 20 candidatos, que era el elegido y se le iba a esperar, lo que hizo que en un principio pareciera factible que el mercado de enero se hiciera sin director deportivo y con el propio Sanllehí, además de Álex Monserrate y Jorge Ripollés, miembros de la secretaría técnica y el entrenador, Fran Escribá. Así ha sido hasta ahora, pero el Tenerife en el acuerdo para su salida no ha fijado ninguna cláusula para que no se pueda comprometer con otro club hasta que pase el mercado y los plazos que manejan el propio Cordero y también el Zaragoza es que sea anunciado y presentado a partir del miércoles, casi dos meses después de la salida de Miguel Torrecilla de ese puesto. Con Cordero llegan dos de sus ayudantes en el Tenerife, Alberto González y Santos Olmo, Fari.

«Como sabéis, estamos en el proceso de confirmar el nombre del nuevo director deportivo», indicó Sanllehí el miércoles pasado en la presentación de Tomás Alarcón, reconociendo de forma implícita que ya se veía el final de la espera y que Cordero estaba a punto de sellar su salida del Tenerife. El ejecutivo catalán ya anunció en su día que el Zaragoza no iba a pagar por fichar a un director deportivo, lo que sí sucedió en 2017 con Lalo Arantegui con la anterior propiedad y tras abonar 25.000 euros.

Lo que es evidente es que la apuesta por Cordero es muy importante a todos los niveles. Es un director deportivo contrastado y con 20 años de experiencia. Nacido en Cartagena el 17 de octubre de 1974 y con un pasado futbolístico que tuvo su listón en Segunda en un efímero paso por el Écija en la 95-96, Cordero (que tuvo un breve paso de unos meses en el Huesca) colgó las botas en el Ciudad de Murcia para en la 99-00 empezar también la labor de director deportivo. Allí, ya ligado con el empresario Quique Pina, ascendió al equipo murciano de Regional Preferente a Segunda y hasta rozó llegar a Primera en la 05-06 y la 06-07, antes de comprar su plaza el Granada 74 y marcharse con Pina a ese club para seguir en los despachos una temporada.

El quinto en Segunda

Estuvo de ojeador del Udinese de la familia Pozzo en la 08-09 y cuando esa propiedad llegó al Granada en 2009 lo hizo de nuevo de la mano de Quique Pina, también máximo accionista y presidente, y logró el ascenso en dos años de Segunda B a Primera, al margen de la consolidación en la categoría.  En 2016, Quique Pina entra en el accionariado del Cádiz con la sociedad Locos por el Balón, es nuevo manager del club y Cordero pasa a ser director deportivo dos años, con un Cádiz recién ascendido a Segunda, manteniendo a Álvaro Cervera y peleando por subir a Primera, siendo despedido tras las desavenencias entre Pina y Manolo Vizcaíno, presidente de la entidad, en septiembre de 2018. Se juzgó nulo el despido y se mantuvo en el club hasta diciembre de 2019, cuando se marchó para firmar solo tres meses después por el Tenerife, que con Ramis de entrenador se quedó, en la final del playoff ante el Girona la temporada pasada, a un paso de Primera. Ahora llega al Real Zaragoza y será el quinto director deportivo en esta época en Segunda tras Ángel Martín González, Narcís Juliá, Lalo Arantegui y Miguel Torrecilla, teniendo en cuenta que el primer año tras el descenso desapareció esa figura y Moisés García León hizo las labores de secretario técnico.

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