11 centros de salud rurales incorporan vigilantes de seguridad

En medio de otro bronco debate en torno a la Sanidad y a la Atención Primaria entre el consejero de Sanidad, José Luis Bancalero, y la oposición, el primero aprovechó para anunciar algunas medidas que se irán poniendo en marcha en breve. Una de ellas servirá para aumentar la seguridad en los centros de salud de todo Aragón. Si esta semana se conocía que desde el 1 de mayo se habían incorporado vigilantes en los hospitales San José y San Juan de Dios de Teruel y en cinco centros de salud de la provincia (Teruel Ensanche, Utrillas, Alcañiz, Andorra y Caspe), esta mañana ha anunciado que desde marzo y hasta junio se están incorporando hasta 18 (incluyendo estos últimos), once de ellos en el medio rural. Hay que recordar que, aunque no se ha hablado, en numerosas ocasiones se ha informado de que incorporar seguridad a un centro de salud cuesta alrededor de 70.000 euros al año.

Como el debate iba sobre Atención Primaria, ha insistido en la necesidad de un pacto nacional por la Sanidad, como lleva repitiendo en las últimas jornadas. Y ha recordado la falta de relevo generacional en la especialidad de Medicina de Familia, que Aragón está intentando paliar con medidas como la retención y atracción de profesionales mediante pluses económicos y beneficios sociales.

"Volver al fango": PP y PSOE vuelven a enzarzarse en un tenso debate sobre la Atención Primaria en las Cortes de Aragón

Ahí, ha señalado el consejero que "los datos muestran una mejoría de un 18% respecto al año pasado, en el conjunto de Aragón". En los sectores de Teruel y Alcañiz, la espera es inferior a un día en prácticamente todos los centros, aunque hay excepciones. Y en Huesca y Barbastro, en casi todos los centros dan cita en uno o dos días.

“Tenemos problemas en Binéfar, con 5,43 días de demora y Sabiñánigo, con 4,17. Pero es que la espera era de más de 7 días en Binéfar y de 6 en Sabiñánigo hace un año”, ha relatado el consejero de Sanidad. Lo mismo ocurre con los sectores sanitarios de la provincia de Zaragoza, donde hay zonas de salud que han reducido las demoras, pero es preciso seguir trabajando, ha incidido.

También ha hecho hincapié en la necesidad de la reorganización de los equipos, en la que ya se está trabajando desde la consejería, aunque también ha precisado que se están dando situaciones en las que es imposible cubrir las jubilaciones porque las bolsas de empleo del Servicio Aragonés de Salud están a cero. Así ha ocurrido en las zonas de salud de Ayerbe o Almudévar.

En el primer caso, la médico que cubría Loarre se jubiló y su plaza, que atendía a un total de 184 habitantes de cuatro municipios, se ha reconvertido en dos puestos de Enfermería, profesionales que están trabajando desde el pasado 4 de marzo.

De esta forma, la zona de salud de Ayerbe, que atiende una población de 1.999 habitantes, está dotada de cuatro médicos de Atención Primaria, cuatro profesionales de Enfermería y un fisioterapeuta. Esta reorganización ha supuesto una mejor atención y, a la vez, una mayor dotación presupuestaria, puesto que la diferencia entre una plaza de médico y dos de Enfermería supone un gasto de casi 15.000 euros más. “No son recortes, es mayor inversión”, ha enfatizado el consejero de Sanidad.

En Almudévar, otra jubilación de un médico ha dejado a un único profesional para atender a los 2.500 habitantes del municipio. En esta ocasión, se ha realizado también una reorganización, de forma que para toda la población de esta zona de salud –que suma cerca de 4.500 habitantes- se mantienen cinco médicos y seis profesionales de enfermería, una de ellas, enfermera de pediatría y, “desde principios de abril, hemos ampliado la dotación de uno a dos auxiliares administrativos”, ha especificado José Luis Bancalero.