INICIO DEL AÑO JUDICIAL

Balance del año judicial en Aragón: Magaña, Casasnovas o Pitarch

Los juzgados han visto desfilar por sus pasillos a rostros muy conocidos de la actualidad aragonesa

La Audiencia Provincial de Zaragoza reanuda su actividad con el juicio por el asesinato del rellano

Prisión permanente revisable para el parricida de La Almozara

Tío y sobrina, condenados a casi 13 años de cárcel por contratar a un sicario para matar a un joven en Caspe

El empresario aragonés, Mariano Casasnovas.

El empresario aragonés, Mariano Casasnovas. / JAIME GALINDO

Los juzgados de Aragón comenzaron ayer el nuevo año judicial 2023-2024 con la reanudación de un frenesí diario que, en el caso de la Audiencia Provincial de Zaragoza, se escenificará este mismo jueves con la celebración de un primer juicio por un delito contra la salud pública. El mes llega cargado de señalamientos y, entre ellos, destaca el jurado popular que dirimirá la culpabilidad o la inocencia de Adil Lazizi con respecto al asesinato de su vecina en San José mientras aprovechaba un permiso penitenciario tras haber matado ya en 2001 a una joven francesa en Madrid. La constitución del jurado queda emplazada para el 12 de septiembre y, a la semana siguiente, se entregará el objeto de veredicto a los nueve miembros del pueblo elegidos para impartir Justicia. 

A modo de balance, los juzgados de la comunidad han visto desfilar por sus pasillos a rostros muy conocidos de la actualidad aragonesa. Uno de ellos fue el ya exconcejal del PSOE, Ignacio Magaña, condenado por el Juzgado de lo Penal número 1 de Zaragoza a una multa de 3.600 euros por conducir sin puntos en el carnet de conducir. De hecho, Magaña había perdido los últimos cuatro puntos de su permiso hacía ya tres años, cuando un radar de la Policía Local le sorprendió a 68 kilómetros por hora en una zona limitada a 30. También circulaba sin seguro.

Por estos mismos pasillos de la Ciudad de la Justicia se dejó ver el que fuera director general del Real Zaragoza, Jesús García Pitarch, quien acabó condenado por un delito leve de vejaciones hacia su expareja durante su paso por la capital aragonesa. El Juzgado de la Violencia sobre la Mujer número 2 le impuso una orden de alejamiento por acosar a su ex vía WhatsApp una vez ya finalizaron su relación sentimental. También vinculado a un pasado reciente en el club blanquillo, la Audiencia volvió a sentar en el banquillo de los acusados a Mariano Casasnovas, el empresario que intentó comprar el Real Zaragoza en el verano de 2014. Acabó aceptando dos años de cárcel por un primer delito de estafa y otros dos por un segundo delito de frustración de la ejecución en relación a un complejo entramado por el que acabó haciendo suyos más de 240.000 euros.

De todas las sentencias redactadas por los magistrados de la Audiencia Provincial de Zaragoza destaca la que recayó sobre Nelson Arnaldo Agüero Valdez: 24 años de cárcel por abusar de una menor de edad en Tarazona y compartirle las fotografías que le había tomado cuando perpetró esos abusos. En materia de agresión sexual, Anouar Et-Taouir fue condenado a 17 años de cárcel por violar y robar a una vecina de Zaragoza en el Canal Imperial: salió de entre los matorrales, le amenazó con un cuchillo, le condujo a empujones a un descampado y allí la violó.

Tampoco pasó desapercibido Pedro Florentino González, el médico que reconoció abusar de 32 pacientes en el centro de salud Parque Goya 2 –siempre mantuvo que fueron «abrazos cariñosos»– y fue condenado a 29 años de cárcel por el Juzgado de lo Penal número 2 de Zaragoza. Sin embargo, su estancia entre rejas solo podrá prolongarse durante tres años porque, ante una condena por varios delitos, siempre se aplica el triple de la mayor del más grave. Entre los casos más mediáticos se cuela el juicio contra el clan del ácido de Caspe por rociar a Kamal: tío y sobrina fueron condenados a trece años de cárcel por contratar a un sicario que acabara con la vida de este joven menor de edad.

Respecto a los jurados populares, Abdelkader Abid Allah Ben Moussa fue declarado culpable por asesinar a su mujer Hasna en Barbastro; María del Carmen Fernández Villa, por asesinar a su marido Raimundo Medrano, quien fuera la mano derecha del Lute, y José Manuel Calvo Ropero, el parricida de La Almozara, por asesinar a su padre. Los jurados solo dictaminaron la inocencia del subinspector del Subgrupo de Hurtos de la Jefatura Superior de Policía de Aragón, José Rafael A. P., por el robo de un alijo de botellas de alcohol. Solo fue declarado culpable y condenado a un año de cárcel su compañero, -el inspector jefe responsable de la Brigada Móvil, de la Unidad Canina y de Subsuelo.