CRECIDA EXTRAORDINARIA DEL EBRO

Aragón supera el segundo envite del Ebro con los ojos puestos en la Ribera Baja

Las principales afecciones se han dado en barrios rurales como Monzalbarba y Alfocea. Sánchez anuncia en Aragón que el viernes los pueblos afectados serán declarados zona catastrófica / El Burgo y Pina son ahora la principal preocupación

Crecida extraordinaria del Ebro en Zaragoza (14 de diciembre de 2021).

Crecida extraordinaria del Ebro en Zaragoza (14 de diciembre de 2021). / POLICÍA NACIONAL

Iván Trigo

Iván Trigo

La de este martes ha sido una jornada de mucho trabajo y muchos nervios para todos los aragoneses que, desde el fin de semana, veían cómo se acercaba una nueva avenida del Ebro sin poder hacer mucho más que esperar. Las administraciones, por su parte, han trabajado y se coordinaron para impedir que las consecuencias de la crecida fueran las peores. Y el río, por último, ha puesto de su parte: las peores previsiones no se han cumplido y el caudal máximo a su paso por Zaragoza, que ayer fue uno de los principales focos de preocupación, no alcanzó los niveles de 2015.

Pero una riada extraordinaria siempre causa estragos y las principales afecciones este martes se dieron en algunos barrios rurales de la capital aragonesa, como Monzalbarba y Alfocea, además de en los pueblos de la Ribera Baja del Ebro, que son los siguientes en recibir esta crecida extraordinaria.

En Monzalbarba varias construcciones se inundaron y ha habido que desalojar a unas 120 personas.  | ANDREEA VORNICU

En Monzalbarba varias construcciones se inundaron y ha habido que desalojar a unas 120 personas. | ANDREEA VORNICU / IVÁN TRIGO

Aguas arriba, en Pradilla de Ebro, el nivel del agua ya había bajado a mediodía más de un metro con respecto al máximo que alcanzó el lunes (7,7 metros). Fue esta localidad aragonesa la que ha escogido el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para hacer acto de presencia y mostrar la solidaridad y preocupación del Estado por los pueblos afectados por la crecida del Ebro.

En su visita a Pradilla (Sánchez se fue después a Navarra y La Rioja), el presidente del Ejecutivo central ha anunciado que será el viernes cuando el Consejo de Ministros declare como zona catastrófica todos los municipios afectados por esta nueva avenida del Ebro.

«Vamos a poner todos los resortes del Estado para responder cuanto antes a sus necesidades y para que en el menor tiempo posible podamos dar por resuelta esta crisis», afirmó el líder socialista, que aseguró que su Gobierno pondrá todos los medios materiales necesarios para que los vecinos puedan «volver a su normalidad».

Militares achicando agua en Monzalbarba.  | ANDREEA VORNICU

Militares achicando agua en Monzalbarba. / ANDREEA VORNICU

Le ha acompañado en su comparecencia el presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, y el alcalde de Pradilla, Raúl Moncín, quien ha reclamado más actuaciones en el río y más limpieza para evitar consecuencias peores en el futuro.

Por su parte, el jefe del Ejecutivo aragonés, ha resaltado la coordinación entre las diferentes administraciones y ha recordado las tareas de limpieza y retirada de grava que se han llevado a cabo en el cauce en los últimos años por parte de la DGA y de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), que depende del Gobierno de España.

En cuanto a las afecciones provocadas por la riada, lo peor se ha dado este martes en barrios de Zaragoza como Monzalbarba y Alfocea. En el primero, unas 120 personas han tenido que ser desalojadas en los últimos días (incluidos los usuarios de una residencia) ante el peligro de que el agua alcanzase sus casas mientras que varias construcciones, así como las piscinas, el campo de fútbol y el cuartel de Sangenis de la Unidad de Pontoneros, quedaron completamente anegadas por la riada.

Los Bomberos, además, tuvieron que rescatar a varias personas que se quedaron atascadas en el camino de Monzalbarba en una furgoneta aunque no hubo que lamentar daños personales. La huerta de Zaragoza se llevó la peor parte y se anegaron casi 2.100 hectáreas de cultivos entre Alfocea y Juslibol. Al sureste de la capital, desde Movera hasta Pastriz, la riada inundó otras 1.080 hectáreas.

En el centro de Zaragoza, en el puente de Santiago, la crecida finalmente no alcanzó los niveles de 2015 y el caudal máximo se quedó en los 2.200 metros cúbicos por segundo y una altura de 5,70 frente a los más de seis que se alcanzaron entonces.

El nivel del agua en Pradilla ayer ya había bajado un metro con respecto al lunes, cuando alcanzó los 7,7 de altura.  | ANDREEA VORNICU

El nivel del agua en Pradilla ayer ya había bajado un metro con respecto al lunes, cuando alcanzó los 7,7 de altura. / ANDREEA VORNICU

La incógnita estárá este miércoles en cómo llegará el río hasta los municipios de la Ribera Baja, aunque según el presidente de esta comarca, Jesús Morales (que es también alcalde de Quinto), las previsiones a última hora de este martes no eran malas. «El caudal ahora es menor que en 2015 y además este año el Gállego no va a aportar tanta agua como entonces», explicó. A pesar de ello, y como medida preventiva, en Pina se ha desalojado a 30 personas con movilidad reducida para evitar rescates a posteriori y la Cruz Roja preparó el albergue de Bujaraloz por si hubiera que evacuar Pina. «Es poco probable», afirmaba Morales.

Según los datos de la CHE, en Gelsa el caudal ayer a las 21.00 horas alcanzaba los 4,72 metros frente a los 5,85 de 2015, aunque la punta de la riada se espera que llegue allí hoy entre el medio día y la tarde. A pesar de las buenas previsiones, ayer por la mañana ya se rompió una mota en Pina de Ebro que dejó impracticable la carretera entre Quinto y Fuentes.

En toda la comarca, efectivos de la Unidad Militar de Emergencias, así como la DGA y los equipos de la propia institución comarcal estuvieron trabajando para reforzar las motas de los pueblos ribereños. En El Burgo se ha construido una segunda barrera para proteger el casco urbano mientras que en Quinto, a pesar de los esfuerzos, ayer ya comenzó a anegarse la parte de la Huerta Alta.